lunes, 26 de septiembre de 2011
A ver que taal ...
A 200 por hora, a toda hostia, no quiero enterarme de lo que pasa a mi alrededor, pero de repente aparece alguien que te dice que aflojes, y cuando aflojas, te das cuenta de las cosas.
Que pase lo que tenga que pasar !
Creer en ello puede ser bueno y no tan bueno. Puede servir de consuelo cuando nos cuesta asimilar o dar explicación a un suceso. Pero también puede desposeernos por completo de toda voluntad, pues nos exime de responsabilidad. Si todo sale a pedir de boca, entonces el empeño en conseguirlo habrá sido inútil porque lo que fuera tenía que pasar de todas formas, con o sin nuestra intervención. Ella trataba de decidir si tenía más fe en si misma que en el destino.
jueves, 1 de septiembre de 2011
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Y ella no entiende por qué la lluvia, la soledad o esa canción inoportuna, le despierta una lágrima y comienza a llorar.
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